Shary’s Povs – ⚠Advertencia⚠: Originalmente este capi constaba de 10.000 palabras, pero por comodidad lo he dividido en dos partes y en algun punto de la lectura habrá R+1+8 o escenas bastante explícitas entre los protagonistas, aclarado eso, bajo su responsabilidad si lo leen.
Ahora, hay imagenes subidas de tono en este capítulo. Por consiguiente, En Alianza YOI irán con Censura y en AO3 si ván SIN CENSURA al igual que Patreon solo que en alta calidad. ¡Nos leemos en las notas finales!
Fic: Y Ahora… ¿Qué Deseas?
Capitulo: ♢ ¡Caricias Profundas!♢
Autora: ¡Sharayanime!
El líquido espeso, caliente y blanco como la nieve viajaba a través de su garganta con brusquedad. Los gestos de su rostro bermellón (tanto por el bochorno como por el placer) fueron imprescindibles y se notó como cerraba sus ojos con furia al lagrimear un tanto por ello.
Podía sentir las palpitaciones del falo en sus pequeños labios y boca aunque ya lo había retirado, podía sentir el sabor que se calaba en su paladar, lo fue degustando no porque él quisiera o porque le gustase (de por sí la sensación era algo salada más no desagradable), sino por lo sorpresivo que le tomó ese orgasmo en su pareja. Trataba de respirar y tosía un poco para hacerle llegar algo de aire a sus pulmones.
En cambio Víctor intentaba estabilizarse aún tumbado en la cama tras el esfuerzo hecho. De haber sabido que su fantasía soñada (ahora realizada) sería con una corrida así de magnífica al ser la primera vez de su japonés en esta forma, hace tiempo que se lo hubiera propuesto. Definitivamente el sexo oral con Yuuri de por medio, entraría en su repertorio de ahora en adelante.
Quizás de lo único que sí se arrepiente fue que…
Bueno, no mucho, solo un poquito…
Oh, ¿A quién engañamos?
Ese desgraciado se prendió otra vez con solo verlo y fue en haber hecho que Yuuri le tocará tragar todo su semen sin darle oportunidad alguna de defenderse. Así que se levantó como pudo, se acercó, se arrodilló para estar a su altura y abrazarlo.
—Yuuri, ¿Estás bién…?— Él aún tosía e intentaba normalizar su respiración. —Черт!, te tragaste todo de golpe.
—No te preocupes. . .Creo que para ser mi primera vez, s-se sintió bien h-hacerlo y te hice feliz.—Lo confesó muy apegado a su pecho y el sonrojo de sus orejas lo delataron—. Sí lo que viene «es de mí Víctor» no hay problema, ¿verdad? —Víctor incrédulo ante ello delineó en boca una sonrisa ladina, lo rodeo con sus brazos, lo obligó a verlo y sus miradas se cruzaron …
—V-Victor…— susurró su nombre muy quedito y enlazó su mano derecha con la ajena. sus ojos acuosos y oscuros anunciaban ansias, esas ansias que a profundidad marcaban pasiones muy vivas para este punto. Su cara denotaba una expresión exótica y belleza descomunal pero también escondía algo más, ese algo que solo aquel nombrado pudo comprender y que ya era muy evidente en Yuuri.
Mas aún cuando el ruso notó su rubor y reacciones en su cuerpo «sensible» producto de lo que acaban de hacer.
—Yo te quiero a tí muy dentro de mi, por favor. —Rogó finalmente.
—Demonios, Yuuri. — Lo silenció, y le dio un beso cargado de afecto, Yuuri solo correspondió del mismo modo o incluso más.
Ambos se daban caricias impregnadas de amor al entregarse a ese placer exquisito, ambos recorrían sus cuerpos entre una danza de manos desesperadas por sentir el tacto ajeno en medio de la oscuridad y la tenue luz de la luna que se podía apreciar por el ventanal de la habitación, dándole un toque íntimo y regocijante. Sus respiraciones al unísono daban una clara señal de cual sincronizados estaban en ese preciso momento y del cual era imposible pensar en detenerse. Víctor dirigió uno de sus toques a los genitales desprotegidos en su pareja y este gimió. Gimió tan suplicante que como pudo, volvió a suplicar en medio de su poca cordura.
—T-tómame, por favor… Tómame las veces que quieras. —Ante el tono delicado y poderoso percibido en sus oídos cual melodía, Víctor se sintió en plenitud, lo acostó en esa cama testigo del encuentro y retiró apropiadamente en ambos lo poco que les quedaba de sus ropas tras el agasajo de palabras hermosas, sus mimos, besos húmedos y estado febril.
Mostrándose como la divinidad de los cielos los trajo por primera vez al mundo, Yuuri no dudó en montarse encima del ruso y en vista que el chico estaba tan fogoso, que no dio balache para que Víctor agarrase el lubricante, Yuuri tomó los dedos de Nikiforov y los humedeció usando su boca como lengua.
Con pericia, Víctor ha de introducir sus dígitos en la entrada ajena, le bastó moverlos un poco (puesto que ya conocía cómo y en qué forma prepararlo) Yuuri se contraía, lagrimeaba placentero demostrándolo en medio de jadeos, sonidos y chillidos.
Cuando hubo suficientes pulsaciones y empujones de parte del ruso, este fue retirando sus dedos uno por uno y Yuuri se agarró firme en la cabecera de la cama. Víctor pretendía usar preservativo pero el japonés en un impulso (y por no querer esperar más) tomó gentilmente la hombría ajena hundiéndola en ese «lugar» y con cuidado, unió su cuerpo al de él, al fin después de mucho, sus almas están conectadas.
—«E-esto…es demasiado»…—Meditó para sus adentros.
En realidad fue tortuoso para él sentir todo ese «grosor» ingresar lentamente cada centímetro de su cavidad anal y que le atravesara como quemadora infernal, para colmo de males, su estrechez no ayudaba a apaciguar nada.
Hace tiempo que no lo hacía.
Víctor lo sostuvo para que no perdiera el equilibro, le dio besos cortos y secaba sus lágrimas mientras esperaba a que su príncipe se reacostumbrara al enorme falo dentro de su interior y a su vez, intentaba bromear un poco para alejar de su cabeza esa sensación de flagelo.
—¿De cuando acá eres tan «Eros», Katsuki?— Yuuri no pudo evitarlo, en medio de su quejido, le salió una sonrisa, sonrisa que le pareció lo mas lindo en la vida al mayor de ojos turquesa, puede que la pregunta lo haya hecho en broma pero también era una forma evidente de ver todo lo que aún le faltaba por explorar de su pareja y el cómo lo sorprendía día tras día.
—Desde que usted Sr. Nikiforov, me enseñó a que debo ser arriesgado.— eso fue suficiente para convencerlo.
Se sintió dichoso por ser él quien provocaba esos arranques candentes o de dulzura, y siguió aligerando el ambiente con su intento voz «dramática fingida» de sú boca de corazón.
—¿Dónde quedo mi «inocente» pupilo?, ¡¿Acaso me quieres «acabar»?! — eso lo dijo con dobles intenciones.
—Víctor tonto. —Río un poco—.No debí hacerlo de esa forma, pero no podía esperar más.— y era cierto ya no podía aguarlo más, lo cual abrazó fuertemente a su hombre y de un modo muy seductor.—No teniéndote así frente a mí. — logró comentar tras varios besos y Víctor también habló en medio de estos
—No pienso mentir, lo admito, esa parte de tí en la noche de hoy me deslumbró.— Dijo descaradamente—. Pero después no te quejes sí mañana no puedes caminar.
—¿Y eso importa ahora?— Le hizo retroceder la espalda blanca y perlada de su amado a las almohadas que estaban pegadas a la cabecera de la cama y soltó en su idioma natal una frase ya conocida para el.— きみ を 愛してる.
Le dio un beso lleno de amor, el otro también respondió con un » я тебя люблю « del mismo modo, tras decir aquello con sinceridad ambos comenzaron con devoción lo que habían anhelado por tanto tiempo tras una promesa, era lo único que necesitaban en estos momentos, solo pensar en ellos y entregarse totalmente el uno al otro.
La necesidad de ser uno aún en medio de sus instintos no les impedía afirmar con seguridad que el «acto de amor» no solo es la unión dos cuerpos, sino que ambos entreguen sus corazones mutuamente con afecto y cariño, en la capacidad de dar y recibir, en mostrar ternura y dureza, de entregarse y acoger al otro del mismo modo o el deseo de dominar y ser dominados de forma respetuosa, (incluso hacerle saber la posesividad hasta cierto punto), de tener la confianza y el miedo en sus venas, de amarse en libertad, de mantener grandeza y brillos de pequeñez…
Todo eso implicaba ese acto sublime.
《 Podemos ser totalmente nosotros mismos cuando ahondamos
mucho más allá de la piel desnuda y expuesta.》
El rechinar de la cama era uno de los tantos sonidos que se escuchaban por toda la habitación lujosa a parte del chapoteo y el contoneo de caderas a ritmo progresivo hechos por el más joven de los dos demostraba espontaneidad, y su voz aunque que la intentará ahogar era un dulce cantar fino cuando lograba estremecerse por aquella virilidad del ruso dentro de él.
Entre más vibraciones sintiera y ajetreo realizará encima del otro, el aumento cardíaco se le aceleraba a borbotones , su agarre frente a la cabecera de la imponente cama Size-king perdían fuerza… En especial cuando el caballero procedente de Rusia decía sutiles frases…Frases que lo derretían desde lo más profundo de su alma.
«Recuerda siempre que eres el tesoro más valioso que tengo»
«¡Te llevaré al las estrellas sí es necesario!»
«!Te deseo inmensamente!»
«Nunca lo olvides»
«Sé mío, Yuuri»
Entre otras (algunas bellas y otras muy subidas de tono) las cuales alardeaba en perfecto inglés, francés o ruso, y eran manejadas con tal pragmática que hasta el poeta más grande quedaba pequeño ante la tenacidad y coquetería de Nikiforov. Todo esto, recobrando la relación con el cuerpo y la unidad de este con la mente y la paz brindada, todo eso pensando en el dueño de su todo y su nada, despertando sus sentidos y encontrado bienestar y alegría en su lucha diaria de cada día junto con él.
Para Yuuri, ese detalle era de las cosas que más le gustaban al intimar con alguien como Víctor (aunque le hiciera ruborizar hasta la médula del pudor que poco o nada ya casi nada le quedaba) Por un momento, Yuuri soltó el apoyo que tenía al inicio encontrándose en las manos y hombros fuertes de su ídolo adorado.
Cerró sus ojos al aumentar con más fiereza su vaivén desmedido, para ese momento su juicio fue nublado por la ola nueva de sensaciones.
—Haa~~Haa~~ Mmmhhhnggg~~ Vik..Viku-to- ru… Yo no…No podré controlar mi v-voz…¡Nhgg~~!—El gemido se escuchaba esplendoroso, como nunca lo hubiese pensado.
Víctor disfrutaba a sus anchas el poder acariciar tal perfección teniendolo encima de él con total libertad.
—Yuuri no te contengas, déjalo salir, no me prives de oir tu voz. —Mencionaba aquel hombre con voz ronca y agitada—. Has música para mí usando tu cuerpo como instrumento.— y remató con su aliento tan cerca de su cuello que le provocaba un escalofrío intenso. Sus sentidos estaban nublados, era algo de otro mundo.
—Yuuri eres tan bello.— atacó sin remordimiento toda la piel expuesta sobretodo sus duros y firme pezones, los tocó, los apretó, incluso los succiono como quisiera y a su antojo—. Dí mi nombre una vez más.
Tenerle así era una maldición predeterminada, y estaba al límite aferrándose al ruso.
—¡Vic-tor…No pares…Ammhg~!— obedeció por inercia estando en su cúspide, y no dejaba de decir su nombre entrecortadamente.
De pronto el japonés no midió sus propios movimientos y uno de ellos fue tan brusco que logró rozar una zona muy susceptible…
—¡¡¡Ahhg!!!
—¿Te gustó allí? —Arremetió contra su parte trasera.
Ese punto encandilaba su lado salvaje, y en respuesta los músculos del muchacho se contrajeron y clavó sus uñas apretándolas la espalda ancha fornida de este. Gruño un poco, pero poco le importó porque ahora solo le interesaba una cosa… Su Yuuri.
—A-allí… ¡Mhg! —sollozó en medio de su súplica y el otro se jactó al verlo de esa manera.
—Dilo apropiadamente, quiero escucharlo. —Amagó a sacarlo para seguir con su tortura maquinada pero el chico encima suyo no le dejó y se hundió nuevamente provocando un nuevo nivel de dolor.
—¡QUE ME FOLLES ALLÍ!, ¡HAZLO POR FAVOR!— Desesperado y llorando tras haberlo hecho.
Una vez escuchado aquello, el de cabellos rubios y de color cenizo claro se dejó de juegos y salió un generoso «¡Perfect!«, río y tomó el mando al posicionar a Yuuri encima suyo, de modo que ambos se pudieran mover como quisieran especialmente aquel de Rasgos orientales.
—Ya es hora de darte placer.— Eso fue lo último que se oyó de sus labios, en un abrir y cerrar de ojos Víctor, lo atacó.
El agite fue coordinado, algo casi exacto, Yuuri subía y bajaba con frenesí y posesividad seguido de un Víctor dominante que dejaba a su paso, mordidas, moretones y chupetones de batalla como prueba de haber ganado esa guerra en el cuerpo de piel nívea, abrazados sin remedio ya no se pertenecían esbozando todo lo que tenían guardado hasta exteriorizarlo a viva voz.
—!Vitya¡… ¡Vit-Vitya!
—¡Dime, Y-Yuurii!
—¡Ya n-no pue-do más! ¡V-voy a t-terminar! Ahhh~~— siguió con su ritmo y gritó agudo, el japonés siguió hasta donde su energía lo permitió al igual que su acompañante, las últimas sacudidas profundas y fuertes hizo que ambos drenaran todo y perdieran sus fluidos de manera abismal y
—¡Ya n-no pue-do más! ¡V-voy a t-terminar! Ahhh~~— siguió con su ritmo y gritó agudo, sin pena alguna a lo que el ruso solo pudo responderle un «¡Hagámoslo juntos, Amor»
El japonés siguió hasta donde su energía lo permitió al igual que su acompañante, las últimas sacudidas profundas y fuertes hizo que ambos drenaran todo y perdieran sus fluidos de manera abismal y melódica, (el primero vertió toda su semilla por segunda vez ahora dentro de esa escultura angelical y el segundo manchó de blanco todo su vientre y el su amante don Juan) concluyendo así el esperado cortejo amoroso…
Después de esa muestra de amor, los dos hombres se tomaron unos segundos para recuperar fuerzas, sobra decir que la sinfonía armónica de sus respiraciones era al inicio irregular y se fue acompasando al tratar de estar tranquilos.
Yuuri al ser quien más trabajó de los dos, cayó a los brazos ajenos y aun agitado, Víctor le dedicó tiernos mimitos en su nariz respingada o su frente la cual estaba cubierta por parte de sus hebras negras y sedosas.
inhalaba el dulce aroma que expelía su pequeño tesoro, uno invaluable y simplemente lo atrajo mucho más para sí en un abrazo protector…Yuuri se sorprendió un poco por la acción tan repentina, pero al instante se serenó en medio de su agotamiento temporal y se dejó hacer en esa felicidad.
El ruso mantenía un sonrisa boba cual infante que ha hecho algo a escondidas y no se conduele de nada, era algo surreal, se sentía flotar en el aire, y llenarse de una alegría indescriptible al tener tan cerca a ese ser humano que le entregó todo.
¿Increíble no?, el mismo muchacho que demostró audacia erótica hace unos momentos sea el mismo que esté ahora como lindo cachorrito ingenuo y soñoliento descansando en su pecho. (y que obviamente, el canalla frentón disfrutó) ¡Ah! pero esperen, esto no termina aquí…
Quizás el round fue de maravilla, solo que ese vergajo lobo insaciable y lastimado en su ego (por las bromas a su persona) ¡QUERÍA MÁS!.
La mano elegante del mayor rozó la barbilla pequeña de Yuuri e hizo que le observará, Víctor le miró con galantería tras hablarle.—Estuviste delicioso príncipe, más ardiente que nunca. —Lo beso firme y sus manos pasaron a los glúteos, a Yuuri eso le arrancó un bonito suspiro, uno largo seguido de un bajito «Tú también fuiste estupendo« y Víctor continuó—. Pero ni creas que va a quedar así, todavía mi orgullo sigue herido y debo remediarlo. —Lo giró poniéndolo debajo de él y abrió las piernas esbeltas y atléticas de Yuuri para que este lo recibiera (por debajo, agradeció a Minako y las espartanas clases de ballet que le dio a su pupilo en su momento, porque el «elongamiento» que adquirió en todas las articulaciones era impresionante) El otro si quiera se inmutó en hacer o contradecir nada, era muy consciente que tras sus palabras (aunque fuesen en gracia) no tendría un perdón tan de fácil.
—Lo sé, y estoy dispuesto a pagar por ello. —Víctor complacido por la actitud encontrada en Yuuri se preparó cual torero listo para correr al ruedo y dio su veredicto. —Prometí hacerte mío hasta que pierdas tu resistencia y esa promesa si la pienso cumplir. — Profundizó el beso a lo francés y lo profano de golpe ahogando el quejido ajeno por unos segundos y después se separo para arremeter contra él con fuerza sacando y metiéndolo a su antojo. —Mmmmh… tan profundo y cálido para mí.
—¡Dios! ¡Mhggg!—El desgarro en su voz ya era notorio, giro su rostro, y cerró sus piernas a la cintura del lobo veterano al jadear por el éxtasis y el escozor que sentía en sus entrañas —.¡Tómame una vez más!—Y no pudo seguir, los dedos depravados sobre su piel expuesta lo terminaron silenciando.
La leyenda del hielo cuyas facciones eran Eslavas/Orientales, entraba sin miedo a esa «cueva» cuya ruta conocía al derecho y al revés, escribía sin vergüenza sus letras en liquido «blanco» con puros te amo, te quiero y adoro en cada hoja descubierta. Yuuri era su libro y Víctor se consideraba la pluma y el escritor que marcaba el ritmo en esta historia.
El filo de su «navaja» era eficaz, cortaba sin vehemencia el interior delicado que consumía en efervescencia, Yuuri sacó los pocos bríos que le restaban intentando acercar su mano a él, la vista del mirar azul anticipó su jugada y la atrapó antes de que no lograra sostenerse y tras ello, dijo con hilo de voz débil y aterciopelada un: —Quédate a mi lado y no me dejes nunca.
«¿Como puedes ser tan cruel y hermoso a la vez?»…—Fue todo lo que infiere mentalmente Nikiforov, esa proposición le invitaba a seguir un camino juntos, a recorrerse y no hacerse daño, un mundo de cristal que solo podrá romperse si al final uno de los dos perece como lo manda la ley de la vida, en definitiva es una llama que desea mantener por la eternidad. Puso su mejor cara y le transmitió seguridad al darle su respuesta—. Siempre estaré contigo y no pienso dejarte aunque me lo pidas.
Ese juramento lo selló con un beso cándido en esa liviana mano que sostiene en la suya.
Seguidamente mandó otro beso en su cuello y como broche de oro, soltó un sagaz empujón dándole en el punto exacto donde el pequeño quedó paralizado del goce. Debido a que aún se encontraba cansado Víctor pudo hacer con Yuuri lo que se le vino en gana y siendo sinceros, Yuuri estaba más concentrado dejarse consentir y disfrutar de los poemas pasionales que cierto ruso le mascullaba en su oído (aunque en ocasiones se resistía) que en quejarse…
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CONTINUARÁ…
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-Sección de Vocabulario (y bien corto):
1) Pragmática: De lo que yo sé (como «profe re-fail» de inglés y español) es que hace parte de la lingüística, y de otras como la comunicación y la psicolingüística, y que se interesa por el cómo el contexto influye en la interpretación del significado y del uso del lenguaje. mmm les recomiendo leer a Searle, Austin, Sperber, Wilson, y Grice si desean ahondar el tema. Especialmente Grice y su «Principio cooperativo» (Víctor, es alguien que lee y analiza todo con antelación, así que sabe cómo y cuándo usar las palabras exactas según la situación, cuando lean a Grice… ¡Me van a entender!…MALDITO RUSO HIJO DE SU MÁRE xD)
2)Concupiscencia: significa el deseo que alguien tiene por bienes materiales o terrenos, pero a nivel de deseo sexual este indica que puede ser exacerbado o desordenado (ni Yuuri y ni Víctor tienen control en sus instintos si se reprimen xD).
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📷N/de la Shary: ¡Este capitulo fue Rebeteado para mejora de redacción!
Ahora si, ¡¡HOLAAAA AL PUEBLO!!! ! ¿COMO ESTÁN ?! …yo espero que bien! joder, y al fin termino con esta mendiga escena y su rebeteo.
XD nooo, esta es una de las razones por la cual no escribo lemon o cosas muy serias.
Durante el viaje a casa tuve fallas con esta plataforma x.x pero ya mero lo subo en AO3 y sí! el capi 5 tiene sus Artworks pero ajá, ya saben watta anda pendejo, al menos aqui en la ALIANZA YOI pude mostrar previos (no mucho, pues ya saben que no puedo) y asi que adoren a AO3 y su sistema genial por si gustan verlos 7u7
Nos vemos en la última Act…Chao pescao! :3
Muchos saludos !!!
Alianza Yuri on Ice 